Desde que perdió la eliminatoria de promoción y ascenso a Primera contra el Deportivo en mayo de 2019 el nueva camiseta del Malaga ha estado luchando por su salvación deportiva e institucional. Dos temporadas muy duras conde ha vivido toda una odisea de supervivencia. Límite salarial sobrepasado, sanción de la Liga, inscripción de sólo 17 y 18 fichas profesionales en cada una de las dos campañas anteriores, suspensión de Al Thani como presidente, nombramiento de un administrador judicial… vida en el alambre. Futnambulismo deportivo.
Por todo ello, y aunque solo hayan transcurrido cinco jornadas, se debe destacar que el Málaga sea sexto en la clasificación. Puesto de playoff que no ocupaba desde el 24 de octubre de 2020 tras un empate en La Rosaleda contra el Mirandés. Desde entonces, el equipo entones entrenado por Sergio Pellicer se movió en la zona media. Desde aquella fecha el puesto más alto que alcanzó fue el séptimo en la jornada 16.
Pero vamos más allá en nuestro análisis. En las 89 jornadas que han pasado desde la fatídica derrota ante los coruñeses, el Málaga solo ha alcanzado entrar entre los seis primeros en cinco ocasiones. Dos en la temporada 2019-20, otras dos en la 20-21 y ahora.. En la primera de las campañas antes mencionadas el equipo dirigido entonces por Víctor Sánchez del Amo ganó en Santander (0-1) y pasó al tercer lugar, siendo sexto en el parido siguiente tras empatar con Las Palmas. Una situación engañosa. Los blanquiazules cayeron en picado y en diez partidos pasaron al penúltimo puesto.
En la campaña siguiente, ya con Sergio Pellicer, el Málaga alcanzó el sexto puesto en las jornadas séptima y octava. Desde entonces navegó sin pasar apuros y soñando en algún momento con algo más que la permanencia. Pero no fue posible y terminó en un decoroso decimosegundo lugar que todo el mundo hubiera firmado.
Ahora las circunstancias son mejores. Aunque el Málaga sigue siendo administrado judicialmente por José María Muñoz, hay un mejor margen de maniobra que ha permitido tener 23 fichas profesionales y empezar la temporada con mejores sensaciones. Nadie menciona la palabra ascenso, pero Manolo Gaspar, el director deportivo, ha elevado el nivel de exigencia: “Es una obligación mejorar lo que hicimos en la Liga pasada” Ahora el Málaga tiene dos tremendas salidas para enfrentarse con dos de los equipos más en forma del campeonato, Ponferradina y Sporting, dos partidos que pueden suponer un definitivo lanzamiento a la cúspide.