El Real Zaragoza entra en la recta final del campeonato con sólo tres puntos de ventaja sobre el descenso, cuando hace tres jornadas esa renta era del doble, y ahora afronta el peor calendario de los nueve equipos implicados en la pelea por la permanencia. Y es que tiene que enfrentarse a tres de los cuatro primeros de la clasificación (Espanyol, Mallorca y Leganés), además de al Las Palmas y al Castellón, este último un rival directísimo.
Ni Juan Ignacio Martínez ni ninguno de sus futbolistas quieren arriesgar en público el número de puntos en el que puede estar la salvación esta temporada, pero de puertas a dentro en el Zaragoza se cifra en un mínimo de 48, cinco más de los que suma ahora. Así que al conjunto aragonés le van a hacer falta dos victorias o un triunfo y dos empates en esos cinco partidos finales.
La cuenta de Twitter ‘Goles de plata’ ha elaborado un informe en el que se detallan todas las combinaciones de resultados posibles para este final de campaña y al Real Zaragoza sólo le da un 9,5% de posibilidades de descenso a la nueva Primera Federación, pero un traspié frente al Espanyol, al que sólo le queda un punto para certificar matemáticamente su regreso a Primera División, podría empeorar muchísimo las cosas. El Zaragoza sólo ha sumado dos puntos en las últimas tres jornadas y ha visto cómo tres rivales (Alcorcón, Logroñés y Castellón) se le han colocado a dos puntos y cómo el Sabadell, el primero por detrás de la frontera del descenso, ha sumado dos triunfos consecutivos.
«Hay que salir a ganar porque los rivales que están por debajo de nosotros siguen sumando y la cosa está cada vez más apretada», resaltó ayer Adrián, una de las voces que todos escuchan en el vestuario, pese a cumplir su primera temporada en el club aragonés.
El Zaragoza completará hoy por la mañana en la Ciudad Deportiva su última sesión de entrenamiento previo al partido de mañana frente al Espanyol (18:15 horas) y JIM dará a continuación su conferencia de prensa y la lista de convocados, para la que es duda el uruguayo Toro Fernández, pese a que lleva ejercitándose desde el lunes con relativa normalidad.