Míchel y Joaquín tiraron por tierra el partidazo de Josan. El de Crevillente marcó dos goles en la primera parte y fue el mejor del partido, pero los ilicitanos no supieron mantener su ventaja y suman ya su duodécimo partido sin ganar. Los pucelanos, por su parte, no hicieron un mal partido, pero se les escapa una victoria ante un rival directo y terminan la primera vuelta con 19 puntos.
El primer tiempo tuvo un solo protagonista: Josan. El centrocampista encontró una autopista libre de peaje en la banda derecha porque Nacho no está bien. Las miradas en el Real Valladolid estaban puestas en el centro de la defensa con Alcaraz acompañando a Joaquín, pero el roto vino en la banda izquierda. No había llegado el minuto 10 y Josan cogió un balón en la banda, se hizo hueco para ponerse el balón en su pie izquierdo y soltar un latigazo desde fuera del área ajustado al palo, al que no llegó Masip. Los pucelanos no se amilanaron, buscaron el empate asociándose en la frontal del área, pero no terminaban de acertar. Weissman estrelló el balón en el palo tras un centro de Luis Pérez, mientras que Orellana y Plano intentaban empujar al equipo pucelano hacia arriba ante un Elche metido atrás, pero que no desestimaba la opción de salir a la contra. Dominaba el Pucela, asustaba el Elche. Milla remató de cabeza un córner que se fue por poco, justo antes de que Nacho recibiera un balón interior de Kike, pero el lateral cruzó demasiado. De esta manera, los vallisoletanos llegaban a tres cuartos, pero ahí se le hacía de noche. Mucho más cuando Verdú le puso un balón larguísimo a Josan, Nacho se la comió y el alicantino volvió a batir a Masip en un jarro de agua fría tremendo para los pucelanos.
Tras el paso por el vestuario y los cambios antes del minuto 60, los blanquivioletas tuvieron más profundidad y eso le llevó a marcar. Plano llegó a la línea de fondo y Weissman entró al remate con Barragán. El balón se coló en la portería y Jaime Latre dio gol, pero el VAR avisó de una posible mano y el trencila lo anuló. Lejos de acobardarse los blanquivioletas empezaron a vivir en el área rival, mientras el Elche retrasó líneas, más si cabe. De esta manera, los locales no lograban disparos claros hasta que Míchel apareció en segunda línea para batir a Badia desde fuera del área (1-2) en el minuto 71. Apretaba a fondo el acelerador el conjunto local, mientras que los visitantes se defendían con uñas y dientes. Tanto Alcaraz, como Plano pudieron marcar, pero tuvo que llegar Joaquín, a falta de un minuto, quien rematara de cabeza un sensacional centro de falta de Hervías que hacia justicia a los méritos de los pucelanos y dejeba con la miel en los labios a los ilicitanos.